Con el explícito título de “Discursos de odio y protección de los vulnerables. El papel del periodista”, el XX Congreso de Periodismo de Huesca ha dedicado una mesa redonda a analizar las causas del ascenso de líderes y partidos como Trump, Bolsonaro o Vox. Organizada por Oxfam Intermón, que por séptimo año colabora con el congreso y moderada por el periodista de La Sexta Carlos Hernández-Echevarría, en la mesa han participado tres reporteros expertos en temas como la pobreza o la migración: la brasileña Maria Carolina Trevisan, la mexicana especializada Eileen Truax y el español Antonio Maestre.
Por qué ahora está creciendo este discurso del odio es la primera cuestión que se ha abordado en la mesa. Los tres participantes han comentado la experiencia de sus respectivos países. Antonio Maestre ha subrayado la culpa de los medios señalando que desde hace tiempo se ha favorecido la polarización al establecer “una equivalencia falaz entre discursos que promueven la eliminación de derechos fundamentales y los que se oponen a ellos, que no se pueden poner en situación de igualdad”. Así, ha señalado que tolerar discursos como los de García Albiol contra la población gitano “difundidos en mediso de comunicación cuando atentan contra su libro de estilo”, ha sido el caldo de cultivo “a la espera de un detonante para que partido hiciera de ese discurso el sostén de su ideología”.
Por otra parte ha reivindicado también que cuando desde estas ideologías se ataca a algún informador “los medios y las asociaciones de periodistas deben hacer piña, porque no se ataca persona en particular sino un símbolo”.
Sobre el caso de Brasil, Carolina Trevisan ha explicado la elección de Bolsonaro, entre otros factores luego destacados en el debate como la descreencia en el sistema político, en que los periodistas lo ignoraron al principio como un candidato sin posibilidades.
El moderador ha contrapuesto esta actitud al seguimiento en Estados Unidos de Donald Trump, aunque Eileen Truax ha destacado que los grandes medios fallaron al cubrir inicialmente su discurso “sin cuestionar ni hacer fact checking” cuando criticaba a emigrantes o musulmanes; una actitud que solo cambió cuando insultó a mujeres blancas “y ya era demasiado tarde, pero si se hubiera hecho desde el principio, Trump no pasa”, ha incidido.
Truax también ha criticado que, por parte de los medios, no hubo acercamiento real al electorado medio de los estados americanos y se cubrió el recorrido electoral del candidato pero “se simplificó de forma muy grosera los motivos de la audiencia, a la que se subestimó”. Así, ha conducido el debate a una cuestión fundamental: los apoyos con los que cuentan estos candidatos, en un sistema político que no responde a las necesidades de amplios grupos sociales.
“Trump no es la causa, es la consecuencia”, ha señalado la ponente para destacar que “no debemos pensar que el día que no esté se acaba el problema. Hay que revisar un sistema que pasa por encima de la gente”.
Finalmente, los intervinientes han reflexionado sobre cómo puede evolucionar el discurso del odio y qué se puede hacer al respecto desde los medios. En este sentido, Antonio Maestre ha apuntado que hay muchos prismas que atender a la hora de informar.